domingo, 11 de marzo de 2012

Elecciones en Eslovaquia: mayoría absoluta para Smer

Con el 100% de los votos escrutados, puede decirse que ha quedado resuelto el único misterio que podían tener las elecciones anticipadas en la República Eslovaca. Los socialdemócratas de Smer no solo han sido el partido más votado, sino que sus resultados han estado por encima de las espectativas y tendrán mayoría absoluta en el parlamento eslovaco. Con algo menos del 45% de los votos (más de un millón cien mil votantes se han decantado por Smer), el partido de Robert Fico tendrá 83 escaños, 7 por encima del umbral que da la mayoría absoluta (gracias al sistema de asignación de votos Hagenbach-Bischoff, vigente en Eslovaquia). Es la primera vez que la "izquierda" podrá gobernar en solitario en Eslovaquia, en el periodo 2006-2010 Fico necesitó el apoyo de los ultranacionalistas del Partido Nacional Eslovaco (SNS) y de los populistas de derecha del Movimiento Por una Eslovaquia Democrática (HZDS, de Vladímir Mečiar). Una de las primeras declaraciones de Robert Fico, tras conocerse los resultados, ha sido anunciar que construirá un estado social, aunque ha mostrado también su inclinación a reunirse con los dirigentes de los diversos partidos de derecha y centro derecha que han conseguido entrar en el parlamento. Las conversaciones existían desde antes, especialmente con los húngaros de Híd-Most y los cristiano-demócratas del KDH, ya que los propios simpatizantes de Smer dudaban de que pudieran conseguir una mayoría tan holgada. Pero vayamos por partes. 

Resultados. Fuente: Aktuality.sk


Si bien el "partido" más votado ha sido la abstención, lo cierto es que los datos e informaciones que llegaban, sobre un más que probable aumento de la abstención, han resultado infundados. El 59% de los eslovacos con derecho a voto decidió ejercerlo el día de ayer, y aunque la participación queda lejos de la de las elecciones de 1998, donde llegó casi al 85%, ha superado a la de las dos últimas campañas electorales. A última hora el votante de izquierdas se ha movilizado en favor de Smer (el segundo partido de izquierdas más votado es el comunista que no ha llegado al 1% de los votos, eso nos da una idea de hasta dónde ha llegado la concentración del voto en la izquierda).

Veamos los resultados totales:

1. Smer - 44,4% (1,1 millón de votos) - 83 escaños
2. KDH (Cristiano-demócratas): 8,8 % - 16 escaños
3. OĽANO (Gente Corriente - liberales): 8,6% - 16 escaños
4. Most-Híd (húngaros, centro-derecha): 6,9% - 13 escaños
5. SDKÚ (derecha): 6,1% - 11 escaños
6. SaS (liberales): 5,9% - 11 escaños

Resultados en las elecciones al parlamento, Eslovaquia, 2012. Fuente: Sme.sk


Fuera del parlamento se ha quedado los ultranacionalistas eslovacos del SNS (dirigidos por el polémico Ján Slota) - 4,6%, los húngaros del MKP - 4,3%. Los demás partidos no han llegado al 2%, el Movimiento 99% se ha quedado en el 1,6%

Lo primero a destacar de los resultados, es que Smer ha conseguido el mayor número de votos (tanto en porcentaje como en números absolutos)  en unas elecciones en Eslovaquia desde la caída del régimen socialista. Desde el año 2002 (las primeras elecciones en las que se presentó) no ha hecho más que subir en número de votos y no olvidemos que ganaron las elecciones pasadas, en el 2010, aunque no consiguió mayoría absoluta - se quedó con un 35% de los votos -  y los partidos de derecha y centro-derecha se unieron para evitar un gobierno socialdemócrata. Smer ha conseguido no "parecer" especialmente salpicado por los escándalos de corrupción que han barrido la escena política eslovaca los últimos meses, digo "parecer", porque en el escándalo Gorila también se han visto implicados políticos de Smer, pero han conseguido quedar en un segundo plano, frente a otros "afectados". Si de "afectados" por los escándalos de corrupción (o más bien culpables) se trata, hay que mencionar al principal, el partido más fuerte de la derecha hasta ahora, la Unión Demócrata Cristiana Eslovaca - SDKÚ, cuyo líder Mikuláš Dzurinda (primer ministro entre 1998 y 2006), deberá luchar a partir de ahora por su mera supervivencia política.  Su partido, que en las elecciones del 2010 consiguió más del 15% de los votos, se ha quedado ahora en un 6% y se puede dar con un canto en los dientes por seguir en el parlamento. Otro bofetón similar del electorado se han llevado los liberales del SaS, uno de los principales culpables de que haya elecciones anticipadas (abandonaron del gobierno de coalición de Iveta Radičová), y uno de los partidos que más ha colaborado en sacar a la luz los trapos sucios del asunto Gorila, pero que a su vez, se han visto afectados por otros escándalos de corrupción y han pasado de poder convertirse en uno de los posibles triunfadores de las elecciones, a estar de chiripa en el parlamento, el 12% de votos de la campaña anterior se han quedado en un 5,8%. Cierto es que quizás lo que más daño haya causado al partido haya sido la excisión del grupo de Ivan Matovič, del Movimiento Gente Corriente, que se ha convertido en la tercera fuerza política del país y en el partido revelación de las elecciones.  Junto a Gente Corriente, el único partido de derechas que salva el tipo es el Movimiento Cristiano Demócrata (KDH) de Ján Figeľ. Aunque también ha sido afectado por los escándalos de corrupción, al igual que Smer, ha conseguido quedar en un segundo plano en las noticias sobre el asunto Gorila,  y más o menos mantiene su porcentaje de votos (sube del 8,5% al 8,8%), aunque gracias a la caída del resto de los partidos de derecha (excepto Gente Corriente), se convierte en el principal partido de oposición. Sin embargo, con ese porcentaje, la guerra civil en la derecha eslovaca está servida.

Dzurinda y su partido, SDKÚ, han sufrido una severa derrocha. Fuente: Pravda.sk

En cuanto a los partidos húngaros, sin sorpresas, los moderados de Híd-Most (que surge como un partido multiétnico, partidario de la convivencia entre húngaros y eslovacos) han pagado en cierta medida su participación en el gobierno anterior y se han visto también afectados por los escándalos de corrupción (auque no tanto como el SDKÚ). Bajan del 8,1% al 6,9%, pero su posición de partido bisagra se ha venido abajo por el triunfo sin paliativos de Smer. Era el partido más dispuesto a colaborar con Smer en el caso de que fuera necesario un gobierno de coalición, y han sido también los primeros que han respondido a la oferta de diálogo lanzada por Fico justo después de saberse que Smer tenía mayoría absoluta en el parlamento (su respuesta: que están dispuestos a sentarse a hablar con Fico, aunque no tienen muy claro de qué hay que hablar, a tenor de los resultados). El SMK (Partido de la Coalición Húngara), más combativo y nacionalista (húngaro, claro está), antaño dominador absoluto de las regiones húngaras en Eslovaquia,  hasta que surgió Híd, al igual que en las elecciones pasadas, se ha quedado a las puertas del  parlamento (repite resultados), es sintomático que no haya podido aprovecharse de la caída en votos de Híd. Aunque la baja participación de las regiones húngaras en las elecciones puede ser la clave de la baja de Híd y del estancamiento del SMK, en Komárno (una de las provincias con mayoría de población húngara), por ejemplo, la participación se ha quedado en el 52%. Uno de los líderes del SMK se lamentaba ante la prensa local del rechazo de Híd a una coalición "húngara", que viendo los resultados podría haberse convertido en el principal partido de oposición en el parlamento.

Robert Fico celebra el éxito de su partido. Fuente: Index.hu


La noticia más agradable de la jornada electoral es sin duda que los ultranacionalistas, el SNS de Ján Slota, se quedan fuera del parlamento (en el 2010 superó por los pelos el umbral del 5%, pero en las elecciones del 2006 estaban en el 11%), las diversas excisiones del partido tampoco consiguen atraer a los electores y quedan en porcentajes mínimos.

A la izquierda del Smer no queda nada. Los comunistas continuan con su lenta agonía (0,7% de los votos frente al 0,8% del 2010 y el 3,9% en el 2006, en el 2002 llegaron al 6,3%) - otros partidos de izquierda ya han desaparecido o han sido fagotizados por Smer. Los verdes no cuajan (Verdes - 0,3%). 


¿Por qué el triunfo de Smer?

Entre 1998 y el 2006 gobernó Eslovaquia una coalición de partidos de derecha dirigidos por el SKDÚ y encabezados por Mikuláš Dzurinda. A nivel macroeconómico cosechó ciertos éxitos, con una política basada en atraer a multinacionales extranjeras, vendiendo mano de obra especializada y muy barata para los estándares europeos (barata incluso en comparación con la de sus vecinos Hungría o Polonia, por no mencionar a Chequia o Austria, claro). Eslovaquia se convirtió en el "Tigre de los Cárpatos" (o en el "Tigre de Panonia"), así llamaban algunos (supuestos) expertos al pequeño país de Centro Europa, por sus altos ritmos de crecimiento económico. Por ejemplo, Eslovaquia se convirtió en pocos años en una potencia automovilística, eso sí, no por la producción propia (que no existe, si exceptuamos algunas fábricas de autobuses), sino por la llegada masiva de multinacionales extranjeras que querían aprovechar los sueldos bajísimos y las ventajas fiscales y de otro tipo que les proporcionaba el estado. Pero esos "éxitos" eran solo aparentes.  A pesar de sus tasas de crecimiento económico el paro era (y es) espectacular, especialmente si uno sale fuera de Bratislava (donde apenas hay paro, dependiendo del distrito oscila entre el 3,7 y el 5,7%) y de su zona de influencia económica. En la actualidad la tasa de paro es del 13%, pero es la media, en las zonas orientales y meridionales el dato se dispara, por ejemplo en la provincia de Rimavská Sobota supera el 36%, en Revúca el 34% . Los sueldos eran (y son) muy bajos, y aunque los bajos precios de productos de primera necesidad evitaba una catástrofe, en la zona oriental y meridional del país hay inmensas capas de pobreza, pueblos enteros viviendo de unas pocas ayudas sociales, que encima fueron recortadas durante los sucesivos gobiernos de Dzurinda (y como consecuencia hubo un aumento de la tensión social, llegándose por ejemplo a producir localizadas rebeliones de ciudadanos gitanos, la situación en algunos lugares era brutal, tristemente célebre se hizo el barrio de Luník IX, en Košice, como ejemplo de pobreza y segregación). A pesar de la propaganda oficial, que resaltaba el hecho del elevado crecimiento económico, la mayoría de la población notaba que eso no iba con ella y que las grandes multinacionales podían estar sacando grandes beneficios, pero ellos desde luego no. En esta atmósfera tuvieron lugar las elecciones del 2006, que ganó por primera vez Smer y por primera vez un partido de izquierdas. Smer era entonces un partido "curioso", socialdemócrata, pero más fiel a la socialdemocracia clásica que los socialdemócratas-liberales europeos, y ni siquiera estaba en un principio aceptado como miembro de la socialdemocracia europea.  A pesar de su triunfo Smer se vio obligado a pactar con los ultranacionalistas del Ján Slota (SNS) y Vladímir Mečiar (líder del HZDS y artífice de la independencia eslovaca en 1993 y dirigente del país durante el oscuro periodo de los primeros años de la independencia). El resto de los partidos parlamentarios, de derecha o centro-derecha, ni siquiera se plantearon la posibilidad de discutir su apoyo a Fico. Fico inició una política diferente (aunque no radicalmente) a la que se había llevado hasta entonces. Aumentaron las ayudas estatales y gran parte de la población tuvo la sensación de que se estaban repartiendo, hasta cierto punto, los supuestos beneficios del crecimiento económico que no habían visto hasta entonces. Las amenanzas de la derecha sobre un endeudamiento del país y un brusco final del progreso económico resultaron no ser ciertas, Eslovaquia siguió atrayendo el capital extranjero y la economía creció aún más. Además de eso, el gobierno de Fico se caracterizó por una retórica políticamente incorrecta y conflictiva en algunos temas. Por ejemplo, nacionalismo eslovaco y aumento del conflicto con las minorías étnicas, especialmente la húngara, y en consecuencia con Hungría; cierto que no solo él fue el culpable, la derecha húngara (en aquel entonces el SMK) dominante en las zonas de población húngara de Eslovaquia también provocaba, y cualquier conflicto encontraba eco en la extrema derecha húngara y eslovaca. Sin embargo también hacía sus guiños a la izquierda: una política de mayor protección social y gasto estatal en sanidad, educación, etc. Y también aquí una retórica políticamente incorrecta: no participaba en las celebraciones en conmemoración de la caída del socialismo, llegó a reconocer en la prensa que la caída del socialismo había sido provocada desde el extranjero y que no veía ninguna razón para alegrarse del cambio de régimen ya que había sido una gran estafa para el pueblo eslovaco. Tanto escándalo como esas declaraciones o más incluso, provocó su participación en varias fiestas o encuentros celebrados en la embajada cubana, en honor al líder de la Revolución Cubana, Fidel Castro, lo que escandalizó a los sectores más "liberales" del país. 
 
Barrio de Luník IX, en Košice, zona oriental de Eslovaquia. Fuente: Endy.sk
 

En el 2010 tuvieron lugar elecciones y Smer las ganó, con un porcentaje mayor que en el 2006. Los simpatizantes de Smer no parecían, desde luego, disgustados o desilusionados con su política. Sin embargo sus aliados perdieron fuerza, el HZDS se convirtió en extraparlamentario y el SNS estuvo a punto de serlo. Además había voces críticas, tanto en su partido como en los demás, que hubieran obstaculizado una posible reedición del gobierno de coalición (las declaraciones racistas del SNS le causaron a Fico más de un quebradero de cabeza). La derecha tenía suficientes apoyos para formar un gobierno de coalición de derechas y arrebatarle el poder a Smer, y así lo hicieron. Se formó así el gabinete de Iveta Radičová, pero el empeoramiento de la situación ecónomica, el aumento de la conflictividad social en el país (por ejemplo la huelga de trabajadores de la sanidad), diversos escándalos, así como los conflictos internos de la coalición entre los grupos más liberales (el SaS) y más conservadores, acabaron haciendo saltar por los aires el gobierno y a Radičová no le quedó más remedio que convocar elecciones anticipadas, apenas 20 meses después de ser investida como primera ministra.  El "Tigre de los Cárpatos" ha pasado a ser el "Gorila de los Cárpatos" o la "República de los Gorilas", después de que el asunto Gorila haya desvelado una trama de corrupción que implica a la élite política, en especial a la vinculada a la época de Dzurinda. Las manifestaciones se han sucedido y se suceden por todo el país (incluso el día antes de las elecciones). La gente llama ahora "gorilas" a sus políticos, con todo desprecio. Es una protesta primaria que surge del rechazo absoluto al sistema político y social eslovaco. En este ambiente de protesta, de desconfianza y de rechazo, Smer ha salido ganando, porque su época de gobierno fue breve, exitosa (no cayó por un fracaso en las urnas, sino por las maniobras de los partidos que tenían la mayoría en el parlamento) y no está relaccionada directamente con el gobierno de Dzurinda y la corrupción galopante que ha quedado de manifiesto en los últimos meses. Además en los últimos tiempos Fico ha moderado su lenguaje, libre del peso de tener que defender a terceros (sobre todo si ese tercero es los ultranacionalistas).  
 
 Todo esto quizás pueda explicar por qué Smer ha acabado sacando en estas elecciones un porcentaje tan alto de votos, y por qué a su izquierda no queda practicamente nada.  
 
De "Tigre de los Cárpatos" a "República de los Gorilas". Fuente: Sme.sk
 
 
Fuentes: Página de la Oficina Electoral Eslovaca, Boom, varios artículos de Čas, Pravda, Sme y Újszó, Index.hu, varios artículos de la Wikipedia en eslovaco sobre las elecciones. Sobre los índices de paro, aquí.

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